Pez Ángel: historia, características, alimentación, cuidados y más

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El pez ángel, también conocido como pez escalar, es una especie que se divide en dos grupos: los de aguas duce que viven en los ríos y los de agua salada que habitan los mares y que por lo general son más numerosos en población. No obstante, los peces ángel de agua dulce son más conocidos por el hecho de que se pueden mantener en los acuarios. 

Lo que más caracteriza al pez ángel es lo exótico de su apariencia, sus colores y belleza. Pertenecen a la familia de cíclidos, es una especie ictícola y su nombre científico es Pterophyllum scalare. La primera vez que se supo de su existencia fue en el año 1823 en Brasil, y desde ese momento se comenzó a clasificar dicha especie.  

Historia del pez ángel

La primera vez de la que se tiene costancia que se incluyo esta especie en un acuario fue en el año 1911, cuando llegaron varios peces a Alemania provenientes de Brasil, y en los que se había mezclado varios ejemplares del pez ángel.

Luego, en 1924, se importaron otros peces en los que también iban algunos especímenes que tenía forma de vela y aletas semejantes a hojas.   Los estudios han arrojado que la mayor contracción de peces ángel se encuentran en río Tapajós el cual se une con el río Amazonas.

Por otra parte, de los ejemplares que se introdujeron a Alemania en la década de los años 10 se vendieron algunos importadores de los Estados Unidos en 1915, estos peces se llegaron a cotizar a $ 75,00 la pareja.

Sin embargo, era muy difícil saber cuál era la hembra y cuál era el macho, por lo que solo se escogía un par al zar. Todo este panorama llevo a que en Alemania y EE. UU se produjeran algunos intentos de reproducción que fallaron, aunque al parecer un grupo pequeño de criadores alemanes lograron obtener algunas camadas luego de muchos años intentándolo.

Problemas con su reproducción

Se ha llegado a la conclusión de que aquellos peces que son trasladados a acuarios y que permanecen en cautiverio luego de haber vivido en su hábitat natural, se reúsan de manera sistemática a reproducirse.

Así que esto ha llevado a que haya una mejor atención en lo que respecta al agua, la luz y la comida que se les proporciona a estos animales que se encuentran en cautividad.

Ya para la década de los 60 el pez ángel se había vuelto popular en los acuarios. Para ese entonces la reproducción para comercio era una tarea muy tortuosa, tanto así que cuando se lograba reproducirlos acababa siendo una nota en primera plana de una revista especializada en estos temas.        

Características del pez ángel

Características del pez ángel

El pez ángel tiene un cuerpo muy singular, es aplastado y muy delgado. Tiene un par de espectaculares aletas ventrales y dorsales, las cuales son triangulares y alargadas, siendo esta parte del cuerpo su atractivo más llamativo y elegante.

Es interesante que sus aletas sean lo que le dan ese aspecto tan imponente, estas miden tres veces más que su cuerpo. Si se cumplen de manera rigurosa con todos los cuidados que se deben tener con el pez ángel, este puede alcanzar un tamaño de entre 15 y 25 centímetros de longitud y vivir de 5 a 8 años.

Pero yendo más allá del tamaño, existen otros aspectos particulares que podemos destacar de la fisiología de este pequeño animal.

Y es que aunque en su habitad natural es de color plateado con manchas oscuras que se pueden diferenciar muy bien, el pez ángel que conocemos es fundamentalmente diferente.

Esto a raíz de la crianza que ha tenido en cautiverio en estos últimos siglos, ya que ahora es mucho más colorido de lo que se puede apreciar al verlo en su forma salvaje.   

Sin embargo, este pez no ha cambiado su carácter, porque a diferencia de otros tipos de peces como el Betta, este es muy tranquilo que vive formando grupos o asociaciones con varios individuos. Lo cual es un punto que se debe tener en cuanta al contemplar la idea de cuidar algunos de estos peces.  

Pues, cuando vive en comunidades pequeñas, este pez puede tornarse territorial y hasta agresivo. Aparte de esto, también es de suma importancia conocer cuáles son los tipos de peces con los que esta especie puede cohabitar.

Por ejemplo, es necesario que no sean muy pequeños, ya que se los pueden comer tal y como lo harían en su estado salvaje.      

Alimentación del pez ángel

El pez ángel es omnívoro, es decir, que puede comer cualquier tipo de alimentos, bien sea plantas marinas, larvas, algas, y hasta algunos peces que sean más pequeños que él.

Este pequeño pez es muy solidario, pues comparte sus alimentos con otros peces siempre y cuando sean de su mismo grupo, esto también se debe a que usualmente no tiene mucho apetito.   

Cuando se tiene un pez ángel en cautiverio se debe tener en cuenta diversos aspectos para preservar su salud. Uno de esto que debes alimentarlo principalmente de hojuelas que puedes ir cambiando periódicamente.

También puedes darles gusanos de sangre o tubifex. Pero lo más importante es bajo ninguna condición puedes alimentarlo con comida viva, pues estos llevaría a la contaminación del acuario. Debes darle alimentarlo de 2 a tres veces en el día.

Por último, si deseas que pruebe algo nuevo, debes dárselo cuando tenga hambre, ya que, por lo general, se reúsa probar cosas nuevas.       

Cuidados del pez ángel

cuidados del pez angel

Al ser un ejemplar de aguas tropicales, el pez ángel debe tener una temperatura en el agua de aproximadamente unos 25 grados centígrados. También debe estar en un espacio con bastante profundidad porque le gusta mucho nadar.

Por otra parte, en lo que respecta a la reproducción, esta puede ser dificultosa en los acuariosPor esta razón, es importante que se generen las condiciones apropiadas para que se pueda llevar a cabo la procreación.

Una vez que esto se ha logrado, los huevos se abrirán pasadas las 48 horas y es en ese momento en el que se debe separar la pareja.  Las crías tienen que estar separadas de los padres al cumplir la semana de vida.

La pecera en donde se coloquen a las crías debe tener la misma agua en la que nacieron, a la que debes agregar unas gotitas de azul de metileno para prevenir que se contagien de hogos.   

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